¿Qué sucede con las obras en curso durante la cuarentena?
Si existen obras en curso, ya sean de carácter privado o emplazadas en zonas comunes del edificio, tendrán la posibilidad de continuar operativas por el momento. La pega, es que muchas acabarán sufriendo la escasez de suministros al estar cerrados muchos de los almacenes que proveen de los materiales de construcción.
Quejas a la policía de que las obras imposibilitan la cuarentena
Durante estos días de cuarentena, algunos vecinos se han percatado de que diversos obreros de sus respectivas zonas seguían operando como si nada. Este hecho ha sido observado tanto en obras públicos como privadas. El Real Decreto impuesto durante el estado de alarma no ha impedido la ejecución de esta actividad por el momento.
Ni las correspondientes Juntas de las Comunidades Autónomas ni los Ayuntamientos, han impuesto pegas de estas obras que ya se encuentran en proceso. Además, es común ver estos días a personas que aprovechan la gran cantidad de tiempo libre con la que cuentan para iniciar pequeñas obras de apaños en sus hogares.
Esta situación ha producido como consecuencia una elevación en las quejas de los vecinos por los ruidos. Estos sucesos han desencadenado en llamadas a la policía por partes de los vecinos quejándose de tan molesta actividad.
Muchos de los vecinos que han procedido a quejarse han sido tanto personas mayores como aquellas que tienen niños en sus domicilios. Estos últimos que se quedan en casa teletrabajando aseguran que es imposible trabajar con ese ruido, al que se le suma la presencia de los más pequeños.
Dichas obras, en su mayoría no puede estimarse si se pasan de los decibelios permitidos, puesto que los agentes de policía en estos días están más ocupados con sus tareas durante el Estado de Alarma, y no pueden atender a cada llamamiento de vecinos quejándose por ruidos molestos.
Se baraja que lo más fácil sería hacer parón de las obras hasta que el Estado de Alarma llegara a su fin. De este modo, no se molestaría a todos los vecinos que se encuentran confinados en sus domicilios y tampoco a los que practican su labor profesional desde casa. Es asunto de la competencia municipal acceder a la autorización de este parón o no durante este período.
Vecinos piden cesar las obras para evitar que se propague el Coronavirus
A parte del molesto ruido que provocan las obras, otros vecinos han alegado que si no se paralizan durante este período se favorecerá al número de contagiados.
Cuando las obras arrancan los vecinos de la zona empiezan a quejarse por falta de solidaridad. Ya que todas estas obras se ponen en marcha como si nada, ajenas a la pandemia por Coronavirus. En muchos casos los obreros operan desprovistos de las correctas medidas para prevenir los contagios. Un caso concreto sería el de unas obras en el barrio de la Alfalfa de Sevilla.
Los vecinos no entienden cómo pueden seguir en marcha las obras mientras ellos siguen confinados en sus viviendas. Los acusan de un total incivismo.
Critican esta acción como una falta de responsabilidad y una imposibilidad de lucha contra el virus. Algunos vecinos incluso han salido a los balcones a avisar a los obreros, diciéndoles que están poniendo en riesgo su salud y no pueden continuar trabajando. Aseguran que ya no se trata solo del ruido, sino también de estar poniendo en riesgo su propia salud y la de los vecinos.
El problema radica en que la actividad de los obreros tanto en la calle, como dentro de una vivienda podrá continuar hasta que el Gobierno determine una medida que lo impida.
Eso sí, habrá circunstancias de antemano que hagan parar las obras. Esto sucederá cuando: si la enfermedad afectará a algún miembro de la obra; en el caso de que los proveedores no puedan seguir con su actividad justificadamente; o en el caso de que sea inviable la adquisición de materiales de obra con los que continuar trabajando.
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