Uno de los derechos fundamentales que se recoge en el Real Decreto Ley de 1/1998 es el derecho a la información y el acceso a los servicios de telecomunicaciones por lo que los edificios de nueva construcción deben contar al menos con la preinstalación de este tipo de servicios.
Además, si un edificio antiguo tiene prevista una rehabilitación o reforma de envergadura, el proyecto de obra también debe prever la instalación de la infraestructura comunitaria necesaria para una antena colectiva, en caso de que esta no existiera.
INSTALACIÓN DE ANTENAS COLECTIVAS
Como la antena colectiva de la comunidad es una infraestructura de telecomunicación común, si no hay una antena comunitaria en el edificio cualquiera de los propietarios tiene el derecho a solicitarla.
Además, al tratarse de un elemento común, para su instalación solo se necesita la aprobación en junta de un tercio de los propietarios que representen a su vez un tercio de las cuotas de participación en los elementos comunes.
Sin embargo, la comunidad no podrá repercutir el coste ni tampoco los gastos de mantenimiento a los propietarios que no hubiesen votado expresamente a favor del acuerdo por lo que solo la pagarán aquellos que hayan votado que sí y solo ellos podrán utilizarla. Eso sí, si algún vecino no estuviera de acuerdo con la instalación pero quisiera beneficiarse de ella más adelante también podría hacerlo previo pago de las cantidades de instalación y mantenimiento correspondientes desde que se instaló el servicio más los intereses legales acumulados.
Además, el comienzo de las obras debe ser notificado a los propietarios con un mínimo de dos meses de antelación y su coste será asumido entre aquellos vecinos que deseen instalar la infraestructura.
¿Quieres conocer el presupuesto para la
instalación de antenas en tu Comunidad?
Instalaciones de antenas individuales
Si lo que se quiere es instalar una antena individual no es necesario que la instalación se apruebe en junta de propietarios. Es importante dejar claro que cualquier inquilino tiene derecho a instalar un sistema individual y a hacer uso de los elementos comunes para su instalación siempre y cuando esta no menoscabe la infraestructura existente y no interfiera ni modifique las señales de televisión ya existentes. En ese caso, hay que comunicárselo al administrador de fincas o al presidente de la comunidad aportando todos los informes y licencias necesarias y estos deberán responder en menos de quince días desde que la comunicación se produzca indicando si ya existe una infraestructura común a la que podría conectarse el solicitante o si está prevista la instalación de una antena que cubra el servicio solicitado en un plazo máximo de tres meses. Si no fuera así o no hubiera respuesta, el interesado o interesados podrían emprender las acciones necesarias para la instalación de la antena y todos los gastos correrían por su cuenta. No obstante, al igual que ocurre con las antenas colectivas, si en el futuro cualquier otro propietario quisiera beneficiarse de esa instalación podría hacerlo previo pago de la cantidad correspondiente.
Por otra parte, cabe señalar también que el Real Decreto Ley 1/1998 indica que se debe evitar la proliferación de antenas individuales por lo que no podría instalarse ninguna infraestructura privativa, sino una común para toda la comunidad vecinal, en dos supuestos particulares:
a) Cuando el número de antenas instaladas, individuales o colectivas, sea superior a un tercio del número de viviendas y locales. En ese caso todas las antenas deben ser sustituidas por una infraestructura común de cuyo pago deberán hacerse cargo todos los propietarios que tienen instaladas antenas para la recepción de servicios de telecomunicación.
b) Cuando la administración no conceda licencia para la instalación por considerar que la antena podría resultar peligrosa o antiestética.
En todo caso, es recomendable contratar a un administrador de fincas que pueda asesorar a la comunidad de propietarios sobre el procedimiento a seguir para la instalación de antenas colectivas e individuales.
Administrador de Fincas Online
Conoce Supervecina, el administrador de fincas 100% Online
AVERÍAS EN LAS ANTENAS COMUNITARIAS
Los problemas de señal pueden deberse a muchos factores y las averías no necesariamente se encuentran en nuestro televisor ni en la instalación doméstica. De hecho, muchas veces pueden darse también en las antenas o en los cables, generalmente en instalaciones antiguas de más de 20 años que están deterioradas por el paso del tiempo, o por problemas de conflictos con otros receptores, por nombrar solo algunas de las más frecuentes.
En ocasiones puede deberse a un conector en mal estado que se podrá sustituir fácilmente, pero en ese caso es aconsejable evitar las conexiones compradas en bazares o similares que no nos garantizan una calidad mínima,porque puede ocurrir que después de realizar el trabajo de sustitución el resultado no sea el esperado por la baja calidad del conector.
Veamos ahora cuáles son los principales problemas que nos podemos encontrar en las instalaciones de antenas colectivas y las posibles soluciones para este tipo de incidencias.
La señal se pierde solo en mi vivienda
En este caso lo más probable es que la avería se encuentre en la instalación particular de tu casa. Esto puede deberse a varios factores, entre los que cabe destacar los siguientes:
- Fallo de un conector. En este caso se sustituirá como he comentado anteriormente.
- El cableado desde la antena hasta la toma de TV está en mal estado. En este caso hay que sustituir el cableado.
Varios vecinos no reciben la señal correctamente
Cuando son varios los vecinos que no reciben correctamente la señal de televisión, el problema puede deberse a varios factores:
Un primer escenario se daría en edificios antiguos en los que la instalación de la antena está resuelta en serie cuando algún vecino ha modificado parte de su instalación, porque si esta no ha quedado bien perjudicará a todas las viviendas que sigan a esta instalación. En este caso habría que revisar la instalación y solucionar el problema de la conexión mal ejecutada.
También puede ocurrir que el cableado que va desde el amplificador hasta la antena estuviera en mal estado por el paso del tiempo. En este caso concreto, todas las viviendas se verían afectadas y tendríamos que sustituir el cableado.
Otro caso en el que se verían afectados todos los vecinos sería aquel en el que el amplificador estuviese dando fallo. Aunque los amplificadores reciben una señal de entrada y la afianzan en mayor o menor grado mejorando la potencia de salida, si la antena recibe la señal mal, el amplificador no podrá cumplir su función correctamente. Por eso, para estas intervenciones sería necesario contar con un técnico especialista que realizará las comprobaciones oportunas y determinará dónde está el problema.
En ocasiones, las deficiencias en la señal se deben a causas geográficas o de orografía. En estos casos podemos ponernos en contacto con organismos municipales o autonómicos para que solucionen el problema porque entonces esa incidencia no sería solo de la comunidad sino a nivel local y habría que colocar repetidores para solucionar esa deficiencia en cobertura.
Además, para este tipo de escenarios existe una solución alternativa más rápida que la anterior que consistiría en colocar una antena parabólica o instalar una torreta e instalar ahí la antena para salir de la zona de baja recepción. Sin embargo, este tipo de solución es cara y requiere supervisión por parte de un colegio de ingenieros de telecomunicaciones por lo que se recomienda intentar conseguir subvenciones locales.
Otro caso que puede darse es que haya demasiados repetidores cerca, ya que en ese caso cada repetidor rebotaría las señales en unas frecuencias particulares. Esto provocaría un conflicto por lo que la señal no se recibiría correctamente. Para solucionar el problema se podría reorientar la antena hacia un determinado repetidor para favorecer la señal de éste o bien colocar pantallas que obstaculicen la señal de uno de los repetidores en conflicto.
Además, también puede ocurrir que la antena se encuentre en mal estado. En este caso habría que sustituirla por una nueva y para ello tendríamos que contratar a un profesional especializado en la instalación de este tipo de infraestructura.
Los problemas en las antenas comunitarias son muy comunes y, como hemos visto anteriormente, pueden deberse a diferentes factores.
Si el problema se encuentra en los conectores de una vivienda tendremos que solicitar los servicios de un profesional que nos haga un estudio del problema y determine cuál es la solución más favorable.
Recordar que para cualquier tipo de intervención es recomendable solicitar varios presupuestos para poder comparar y así optar por la solución más favorable en calidad y precio. Además, así contaremos con la valoración de diferentes profesionales y podremos elegir con pleno conocimiento de causa.