Suministro de agua fría en comunidades de vecinos

En muchas comunidades de propietarios es necesario habilitar un recinto para la ubicación de la maquinaria encargada de que el agua llegue hasta los grifos de las viviendas, incluso hasta los de las últimas plantas. Sin embargo, aunque los cuartos de maquinaria para agua fría y agua caliente cumplen la misma función, en realidad presentan bastantes diferencias. En este artículo hablaremos tanto del cuarto de maquinaria como de los contadores de agua fría en las comunidades de vecinos.

Instalación de agua fría en comunidades de propietarios​

Según el artículo 13.4 relativo al suministro de agua del Código Técnico de la Edificación: «Los edificios dispondrán de medios adecuados para suministrar al equipamiento higiénico previsto de agua apta para el consumo de forma sostenible, aportando caudales suficientes para su funcionamiento, sin alteración de las propiedades de aptitud para el consumo e impidiendo los posibles retornos que puedan contaminar la red, incorporando medios que permitan el ahorro y el control del agua».

Esta sección del Código Técnico de la Edificación  se refiere a la instalación de suministro de agua fría en los edificios incluidos en el ámbito de aplicación general del CTE y especifica claramente que «el agua de la instalación debe cumplir lo establecido en la legislación vigente sobre el agua para consumo humano» por lo que es obligación de la comunidad de propietarios garantizar el perfecto funcionamiento del cuarto de máquinas del inmueble.

Hoy en día, debido a los daños que causamos al medio ambiente y la deforestación, es necesario tratar el agua para garantizar que es apta para el consumo humano. Por eso, en todas las poblaciones existe una empresa pública o dependiente de un organismo público que se encarga de suministrar agua potable y de llevar a cabo las tareas de captación, almacenamiento, depuración, distribución y saneamiento del agua que llega a nuestras tuberías.

En zonas urbanas, el abastecimiento de agua fría en edificios se realiza desde la red pública o municipal. Por su parte, la instalación de agua fría de un inmueble está compuesta por varios elementos:

 a) la acometida a ramal, que enlaza la instalación del agua fría del edificio con la conducción de la red pública y consta de un grifo de toma conectado a la red pública, un ramal, una llave de registro y una llave de paso;

 b) la batería de contadores, que por lo general se instalan en la planta baja del edificio y van conectados a los contadores individuales de cada vivienda.

 c) el contador, que se utiliza para medir la cantidad de agua consumida,  y cuya instalación se realiza de forma individual o colectiva entre la llave de registro y la llave de paso

d) el montante, que es el tubo que corre desde la llave de paso o llave de salida desde el contador y asciende hasta el nivel superior de cada vivienda. 

En la entrada a la vivienda se instala otra válvula llamada llave de paso a la vivienda que es quien distribuye el agua a los diferentes artefactos sanitarios situados en el interior de la vivienda. El agua debe llegar con buena presión de red ya que eso condicionará la calidad del suministro, así que cuando la presión de red no es suficiente para elevar el agua a cada vivienda, se utilizan grupos de presión.

Componentes principales del cuarto de máquinas de agua fría​

Normalmente, en los cuartos de instalaciones de agua fría se encuentran instalados los siguientes elementos:

• Uno o varios grupos de presión que elevan el agua cuando no es posible que llegue a los puntos más altos.
• Uno o varios depósitos de agua que la reservan acumulándola en su interior.

También, aunque con menos frecuencia, nos podemos encontrar válvulas reductoras de presión, que cumplen la función contraria que los grupos de presión, y otro tipo de maquinaria para la mejora de la calidad del agua, como por ejemplo, máquinas descalcificadoras.

Grupos de presión

Uno de los problemas con los que se encuentran los edificios es la falta de presión o suministro insuficiente a los pisos superiores, así que la función de estos grupos de presión es aumentar la presión del suministro de agua cuando es mínima o insuficiente para distribuirla por las tuberías y elevarla a los distintos puntos de consumo del edificio. Se instala después de la llave o contador general y se pueden distinguir dos tipos diferentes:

• Convencionales: compuestos por un depósito auxiliar, un equipo de bombeo con un mínimo de 2 bombas y depósitos de presión de membrana.
• De caudal variable: se suelen utilizar para grandes instalaciones, no necesitan el depósito auxiliar de alimentación y las bombas son de caudal variable para mantener la presión de salida del agua constante.

Válvulas reductoras

Al contrario de lo que ocurre con los grupos de presión, su función es controlar la presión cuando esta resulta excesiva.

Depósitos de agua

Sirven para alimentar al grupo de presión y reservan el agua cuando el suministro no es continuo. Su número y capacidad de almacenamiento variará dependiendo de la cantidad de puntos de consumo que haya que cubrir siendo mayor cuanto mayor sea el número de viviendas a abastecer. Por norma general existen dos tipos de depósitos:

• Depósitos de superficie: se instalan sobre el suelo y suelen ser cilíndricos, de fibra de vidrio o plástico.
• Depósitos enterrados o aljibes: son más comunes en grandes urbanizaciones o recintos en los que hay que abastecer a un gran número de viviendas o industrias.

Sistemas para mejorar la calidad del agua potable en una comunidad de propietarios​

Hoy en día, en muchas viviendas se están instalando aparatos para “mejorar” la calidad del agua potable que están generando muchas controversias. Aunque no está demostrado científicamente, algunas organizaciones denuncian que el agua potable del grifo afecta a la salud por su gran contenido en calcio, especialmente cuando se trata de aguas duras. Mientras, otras defienden que tanta purificación del agua reduce el aporte de minerales beneficiosos para el cuerpo y que a la larga acabará perjudicando a la capacidad inmunológica de los que la beben.

En todo caso, de lo que no cabe duda es de que este tipo de aparatos ayudan a quitar ese sabor a “tubería” que hace que prefiramos más el agua embotellada que la del grifo y a reducir las obstrucciones de las canalizaciones que se producen a consecuencia de la adherencia de minerales como la cal. De hecho, la cal y óxidos que se van acumulando a lo largo de los años en las tuberías van obstruyendo el paso del agua y reduciendo el caudal. 

Por eso, a veces es necesario proceder a la limpieza o reposición total de las tuberías con el consiguiente gasto para la comunidad de propietarios. Esto mismo puede suceder en las tuberías interiores de cada vivienda ya que la mayoría son horizontales y es más fácil que los materiales sedimenten.

Para evitar en la medida de lo posible la acumulación de cal y óxidos, en el mercado existen diferentes tipos de aparatos descalcificadores:

• Químicos: Se basan en la ionización de compuestos químicos de sales de sodio o potasio. Los aparatos existentes en el mercado ofrecen el tratamiento de grandes caudales por lo que es muy recomendable instalarlos en edificios de viviendas. Son caros pero el coste se puede repartir entre todos los vecinos para que su instalación individual resulte más económica. Sin embargo, necesitan un control regular de funcionamiento  porque hay que aportar sales de manera periódica.
• Catalíticos o físicos: Reducen la dureza del agua mediante un proceso que no necesita aporte de sustancias químicas ni conexión eléctrica alguna y, por lo tanto, se comercializan como la solución más ecológica. Hay aparatos para viviendas unifamiliares y edificios plurifamiliares, pero la base científica en la que se fundamenta el proceso aún no está lo suficientemente clara.
• Mecánicos o equipos de ósmosis inversa: Limpian el agua de partículas e impurezas a través de filtros y membranas. Necesitan un cambio anual de los cartuchos filtrantes y, por su poca capacidad de producción de agua, se suelen instalar solo para purificar el agua de consumo en viviendas unifamiliares.
• Eléctricos: consisten en adosar a la tubería general de agua un aparato conectado a la red eléctrica. Producen un campo magnético que rompe los cristales de calcio dificultando así su adhesión a las paredes de las tuberías. Son baratos pero su eficacia aún no ha sido comprobada científicamente

Individualización del consumo de agua fría en una comunidad de vecinos​

Aunque cada vez es menos habitual, en algunas comunidades de propietarios existe un único contador tanto para las zonas comunes como para las viviendas del edificio, por lo que los gastos relativos al consumo de agua suelen repartirse entre todos los copropietarios sobre la base del coeficiente de participación. 

Esto en un principio puede parecer positivo, pero lo aconsejable instalar contadores individuales en cada una de las viviendas para que cada uno de los vecinos pague por el agua que consume. Así, se evitan conflictos vecinales por consumo excesivo de agua, además de contribuir notablemente al ahorro de agua en el edificio como consecuencia de la mayor concienciación sobre el uso racional del agua.

Dado que el gasto de agua es susceptible de individualización, cualquier vecino puede solicitar la instalación de un contador de agua privado en su vivienda. Para instalar los contadores individuales no es necesario acuerdo comunitario, aunque sí es conveniente tratarlo en la junta de vecinos para que todos los propietarios estén informados y puedan instalarlo también si les interesa. En cualquier caso, aunque se aprobara por mayoría, no se puede obligar a nadie a instalar el contador individual, ya que cualquier propietario está en su derecho a negarse.

De la factura global a nombre de la comunidad de propietarios que se paga al suministrador, se descuenta el consumo del propietario o propietarios que tengan contadores de agua individuales y el consumo de agua destinado a las zonas comunes, y el resultado se reparte entre las viviendas que no tengan contador individual. 

En este caso, se puede hacer una estimación del agua consumida para el mantenimiento de las zonas comunes del edificio, aunque lo aconsejable sería instalar un contador individual de uso exclusivo para el agua destinada a las zonas comunes que correría por cuenta de la comunidad de propietarios.

Normativa

La normativa que en España regula el diseño, instalación y mantenimiento de los equipos de los cuartos de máquinas de suministro de agua fría es el Código Técnico de la Edificación en su apartado HS-4 sobre salubridad y suministro de agua. Para conocer más detalles y leer la normativa completa relativa al suministro de agua fría, consulte el texto del Código Técnico de la Edificación.